Vas a ser una zorra. Porque puedes serlo. Y yo acabaré solo, aunque intente cuidarte. Subió a la torre más alta para ver de cerca las estrellas. Y le parecieron tan horribles que saltó. Un cuerpo occiso y en llamas surcando el aire en vertical. Una auténtica tragedia. Y así fue como aprendió que los sueños y la belleza no son tangibles. O sí. En cualquier caso, cuidado. Terminarán por acabarán contigo.
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